martes, 17 de junio de 2008

P.Fray Alberto Justo O.P. "Hacia una filosofia del desierto" (continuaciòn)


En la introducción encontraras, amigo lector, algunas pistas.Pero que quede claro que lo que aquí se intenta decir es solamente una pobre aproximación al misterio.El hombre, hoy, teme el misterio. Aventurarse por esos caminos que no se distinguen bien, lo atemoriza porque no lleva consigo los documentos de la Compañía de Seguros que promete protegerlo. Por otra parte las técnicas adquiridas no parecen muy idóneas para guiarlo. Tampoco les sirven las Ciencias. Y si bien es verdad que los filósofos y teólogos le prometen mucho, sobre todo los mas especializados, no son pocos los que, en la mitad de la carrera, lo dejan en ascuas. El desafío, como dicen por ahí, no es pequeño.

Pero es hora de despertar y de animarse. No sea que se haga mas tarde y perdamos otra oportunidad. El Bachiller Sansón Carrasco, cuando antes de morir don Quijote, supuso una nueva locura en el hidalgo, le dijo : "¿Agora, señor Don Quijote, que tenemos nueva de que esta desencantada la señora Dulcinea, sale vuesa merced con eso? Y agora que estamos tan a pique de ser pastores, para pasar cantando la vida, como unos príncipes, quiere vuesa merced hacerse ermitaño? Calle por su vida, vuelva en si y déjese de cuentas" (II, cap.74 ) No se cuantos habrán reparado en este "reproche" de eremitismo hecho por el Bachiller. Manuel Garcia Morente decía, a propósito del caballero cristiano, que " este propende un poco a recluirse en su soledad. Si Don Quijote no hubiese muerto, al curarse de su locura se habría hecho fraile" ( El Caballero Cristiano, Buenos Aires 1938, p.111 ) Pero no es este aspecto el que deseamos subrayar. Nos importa, en cambio, una verdad muy simple: la salud proviene de un sosiego, de la paz que, luego de un sueño, invade el corazón. No invalida lo anterior,porque lo hecho no puede cancelarse, sino que alumbre ahora una luz mas alta que Don Quijote señala después de haber " dormido de un tirón ": "¡Bendito sea el poderosos Dios que tanto bien me ha hecho! En fin, sus misericordias no tienen limite, ni las abrevian ni impiden los pecado de los hombres "...Y la sobrina, desconcertada (como siempre los mas cercanos son los que ven menos ) pregunta "¿Que misericordias son estas, o que pecados de los hombres ?- Las misericordias- respondió Don Quijote -sobrina, son las que en este instante ha usado Dios conmigo, a quien como dije, no las impiden mis pecados "(ibid) ¡Magnifica aventura, de mayor arrojo que el lance con el león! Nuestro hidalgo se da cuenta de la infinita misericordia de Dios, y que el amor divino no tiene limite alguno. Ahora se abandona confiado, en El . ¿Ermitaño? Sin duda la quietud lo dispondrá a morir, pero su corazón ha descubierto la misericordia y con ella el Don de Dios.

Por ello. amigo lector, no dude en entrar a la ermita de tu corazón. Tus pecados no lo impiden, porque nada ni nadie puede apartarte del Amor de Dios revelado en Cristo Jesús, si tu no lo quieres. Y la ermita de tu corazón, esta en el Espíritu, en quien eres uno con Dios. ( cfr. Rom.8,38-39 ).....continuara...